El trading es el arte de negociar y/o especular en los mercados financieros con el objetivo de generar rentabilidades en el tiempo.
A diferencia de una “inversión”, el trading es más de corto plazo; semanas, días, horas e incluso minutos.
Se puede realizar trading en divisas, commodities, acciones, futuros, etc. La globalización y el desarrollo de la tecnología han hecho que ahora cualquier persona puede acceder a realizar trading y sentir la adrenalina de transar en los mercados financieros.
Es necesario que la persona que está interesada en realizar trading evalúe sus riesgos y su tiempo para aprender a conocer los principios más importantes del trading.
A menudo en la mayoría de cursos o charlas nos enseñan 2 principios para tener éxito en el mercado:
1- Comprar barato y vender caro
2- Siga la tendencia
Existen multitud de etiquetas para catalogar a un trader en función de la tipología de trading que lleva a cabo en su operativa habitual, pero sin lugar a dudas, los grandes grupos de trading que engloban al resto son dos: el scalping y el swing trading.
Esto tiene que ver fundamentalmente, con la duración de las operaciones. Mientras el scalping consiste en tomar operaciones a muy corto plazo, siempre ejecutadas dentro de un mismo día (de ahí surge el concepto de Day Trader, o trader intradía), el swing trading es un tipo de trading mucho más tranquilo cuyas operaciones tienen un mayor recorrido temporal.